Miles de cuentas de WhatsApp están siendo añadidas a grupos en los que se promociona un fraude de supuesto trabajo en casa que consiste en dar Like a cuentas de Instagram a cambio de transferencias de dinero.
Los objetivos de este fraude son, en primer lugar, obtener datos personales y bancarios de las víctimas que puedan ser utilizados para cometer más estafas; y en segundo, condicionar el supuesto pago de recompensas a cambio de depósitos de dinero para, supuestamente, desbloquear las ganancias obtenidas.
El fraude comienza cuando el número celular de las víctimas es añadido a grupos de WhatsApp de manera repentina y sin haberlo solicitado.
En estos grupos se añaden a cientos de personas a la vez para generar más interés, pero quienes en realidad interactúan entre sí para hacer preguntas y mandar supuestas pruebas de que todo es cierto son los mismos estafadores.
Es decir, los propios delincuentes se responden a sí mismos mostrando capturas de pantalla de que el trabajo es real y que sí les llegan los pagos prometidos.
Según los estafadores, el trabajo funciona así:
Debes dar like y comentar publicaciones de Instagram.
Tienes que unirte a un grupo de Telegram para enviar capturas de pantalla en las que compruebes que hiciste el paso anterior.
Tienes que abrir un chat privado con el administrador del grupo de Telegram para dar tus datos personales y bancarios para que te den el pago.
Luego de recibir el primer pago, que son unos 50 o 100 pesos, debes completar una serie de tareas.
Estas tareas son dar likes a más páginas o calificar productos en tiendas en línea.
Ahora bien, los 50 o 100 pesos que le dan a la víctima sí se ven reflejados en su cuenta bancaria. Este dinero es el primer gancho para ganarse su confianza y motivarlo a seguir con las tareas.
Hasta ese punto, la víctima ya dio sus datos personales y bancarios que lo ponen en riesgo de potenciales fraudes, pero lo peor apenas comienza.
Las tareas que les son asignadas tienen recompensas de 500 o hasta 2 mil pesos; por lo que en una sola tarde la víctima podría acumular hasta 10 mil pesos en supuestas ganancias.
Para poder liberar ese dinero, los estafadores exigen a la víctima un depósito para liberar su recompensa; también puede ser de 500 a 2 mil pesos.
Si la víctima no cuenta con dinero suficiente para hacer ese pago, lo intentarán convencer de pedir prestado a familiares o amigos, y que al final ese pago le será devuelto junto con su recompensa, por lo que no quedará endeudado.
Si la víctima accede y les deposita el dinero, los estafadores cierran el chat y bloquean cualquier tipo de contacto.
De esta forma, las víctimas perderán su dinero y no tendrán manera de denunciar a los estafadores, pues la supuesta recompensa nunca existió y los delincuentes suelen usar la opción “vaciar chat” para eliminar cualquier rastro de la conversación.
Los grupos de WhatsApp donde inició el contacto también son suspendidos luego de que un buen número de víctimas ya cayeron en el fraude.
Lo único que queda entonces, y que muchas víctimas intentan, es ir a reclamar a las cuentas de Instagram a las que les dieron like inicialmente, pero a veces ni siquiera son parte del fraude.
Los estafadores eligen cuentas de negocios o influencers reales para hacer más creíble su engaño, para luego dejarles a esos usuarios la tarea de lidiar con las personas que cayeron en el fraude.
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